Las conmemoraciones consecutivas del tercer centenario de la muerte del escultor bastetano José de Mora (†1724) y del arquitecto lucentino Francisco Hurtado Izquierdo (†1725) se unen al hecho de cumplirse cien años de la publicación pionera que dedicó al citado escultor el historiador granadino Antonio Gallego Burín (1925) y el 75 aniversario de la publicación del documentado estudio sobre el arquitecto mencionado por el investigador británico René Taylor, aparecido en lengua inglesa en la revista norteamericana The Art Bulletin (1950). Es ocasión propicia, so pretexto de revisar ambas figuras y sus contextos histórico-culturales, para profundizar en el tiempo barroco y su arte en la monarquía hispánica, campo al que se ha consagrado un considerable esfuerzo de investigación en las últimas décadas. En esta línea se ha renovado la mirada al arte barroco español, proponiendo una visión integrada que implementa el estudio de artistas y obras con un análisis ponderado de su contexto ideológico y social.
Recogiendo ese testigo, el objetivo del congreso se establece sobre un marco amplio que abarca el barroco maduro, desde el último tercio del siglo XVII hasta finales de la centuria siguiente, en el que focalizar la atención sobre distintos aspectos que se están revelando fundamentales como la condición social del artista y el desarrollo de la práctica de la escultura, las fronteras con las otras artes, el diálogo centro-periferia y la emergencia de nuevos núcleos de producción escultórica en el barroco hispánico, la integración de las artes en experiencias perceptivas unitarias (especialmente en la arquitectura de retablos y en el ámbito de la fiesta barroca), la evolución de la religiosidad popular y su influencia en el desarrollo de la imagen devocional, el cotejo con parejas experiencias en otros territorios de la monarquía hispánica, tanto en el ámbito mediterráneo como de ultramar y, finalmente, la presencia de la escultura barroca española en el coleccionismo artístico y su fortuna crítica hasta la actualidad.